Actualmente hay escasez de demanda de empleo y eso
significa que cuando acudimos a una entrevista, debemos ir muy bien preparados,
para ser los seleccionados, para el puesto de trabajo que vamos a ser
entrevistados.
Normalmente, cuando presentamos candidatura para
ocupar un puesto de trabajo, se suele reflejar nuestro perfil profesional,
incluyendo el perfil académico y la experiencia de nuestro trabajo, aunque
podemos ser innovadores y podemos presentar diferentes tipos de curriculums.
Pero lo que mas cuenta, es la entrevista personal, que
es allí donde debemos “enamorar” a nuestro entrevistador, debemos tener en
cuenta que el entrevistador habrá recibido muchos curriculums como el nuestro y
resulta que hemos sido de los pocos privilegiados que podrán conversar con el
entrevistador para poder obtener dicho lugar de trabajo.
Una forma de “enamorar” a nuestro entrevistador y que
seamos los elegidos para desempeñar el trabajo es mediante nuestra aptitud que
la palabra viene del latín “aptus”, que significa “capaz para”, por lo tanto, diremos
que es la capacidad de una persona para realizar de forma adecuada un trabajo o
tarea a desempeñar, lealtad, preactivo, pero también encontramos reflejadas las
capacidades cognitivas, características de personalidad
y emocionales e incluso las habilidades innatas o capacidad de aprendizaje.
Algunas aptitudes buenas a tener, que muchos de
nosotros poseemos y que debemos destacar en una entrevista son,
responsabilidad, ética, honestidad,
trabajar bajo presión, creativo, dinámico, motivación, constancia, liderazgo,
flexibilidad, capacidad de adaptación, iniciativa, capacidad de trabajo en
equipo e incluso dependiendo del lugar a desempeñar, aptitud verbal o física.